A continuación, les compartimos algunas herramientas para
que practiquemos las habilidades necesarias para aprender a considerar las
consecuencias de nuestros actos cuando estamos resolviendo problemas con
nuestros hijos.
¿Cómo podemos aprender a considerar consecuencias y ayudar a
nuestros hijos a desarrollar esa habilidad?
- ¿Cómo me sentiré después si decido hacer o decir eso?
- ¿Cómo se sentirán las demás personas involucradas en esta situación?
Cuando les mostramos a nuestros hijos que todos podemos equivocarnos les enseñamos a asumir y reparar los errores.
3. Estableciendo acuerdos: Cuando construimos las reglas con ellos, les permitimos comprender qué está bien, qué está mal y cómo nuestras acciones tienen un efecto en las personas que nos rodean y en nuestras relaciones.Identifiquemos cómo queremos que sean nuestras relaciones.
Pensemos cómo nos queremos sentir en la casa y con cada uno de los miembros de
nuestra familia y compartamos con ellos esas ideas.
Acordemos entre todos qué comportamientos específicos necesitamos poner en práctica para lograr esas relaciones y dinámicas (por ejemplo, comunicarnos asertivamente y sin agredirnos, encargarnos del aseo de una parte de la casa, cumplir determinadas horas de uso de la televisión).
Identifiquemos por qué cumplir cada acuerdo es importante. Preguntemos
- ¿Qué pasaría si todos incumplimos este acuerdo?
- ¿Cómo nos sentiríamos cada uno de nosotros si otra persona de la familia incumple este acuerdo?
- ¿Cómo nos sentiríamos si todos cumplimos los acuerdos?
- ¿Por qué este acuerdo es importante para que tengamos una buena relación en esta casa?
No hay comentarios.:
Publicar un comentario